Con los puños cerrados

Samantha Ferrer
 

Si no estás contento de ti, ¿quién lo estará?

Si no sientes orgullo por lo que haces ¿quién lo sentirá?

Si no tienes respeto por tus acciones ¿quién lo tendrá?

Si no sientes admiración por lo que emprendes ¿quién la sentirá?

Si no das crédito a tus decisiones ¿quién se fijará en ellas?

Si eres capaz de engañarte a ti mismo ¿a quién no engañarás?

Dios!!! es impresionante como todas estas preguntas me han movido el piso, y es que por lo general necesitamos tocar fondo para darnos cuenta que la vida, bellísima por demás, nos brinda día a día la posibilidad de recapacitar, de ser mejores, de reconocernos en un ser único, capaz, emprendedor, con muchas virtudes y habilidades que se ven ensombrecidas en ocasiones por una baja auto-estima, por miedo a tomar nuevos desafíos, a dar un primer paso y cambiar de camino.

Siempre podemos detenernos, cambiar de parecer y elegir de nuevo, si tu mente esta en temor tus emociones serán de ansiedad, no te creerás capaz de logran tus metas, no darás créditos a tus decisiones, ni te sentirás orgulloso de ti y en consecuencia te estarás engañando, tomando decisiones en contra de tu paz y tu evolución.

Estoy convencida que admitir los temores y enfrentarlos cara a cara y tener la fortaleza de pedir ayuda y la humildad de aceptarla, es tener valentía, es  negarse a desistir, aunque la posibilidad te intimide, es trazar tu meta, mantenerte fiel a ella y hallar soluciones para los obstáculos!!

Estoy convencida que permanecer frente a la vida con los puños cerrados es la peor actitud que podemos tomar, pensando algo así como: estoy bien, estoy perfectamente, no necesito nada, cuando añoramos tantas cosas y necesitamos tanto, o pobre de mi, por que a mi, no puedo con esto, sabes? esto es auto engaño…

Debemos llegar a entender que tenemos que sanarnos, vivimos en un mundo condicional y hemos heredado de los otros las condiciones que aplican en cada momento de nuestra vida, condiciones que nos han llenado de limites, de parámetros, pero si lleváramos la bandera del amor por delante seria otra cosa.

El amor es tan maravilloso que sigue siendo el motor de nuestra vida, si pudiéramos aprender de un amor despojado de todos los límites y sufrimientos seria maravilloso.

Es por esto que pienso que debemos sanarnos, sanarnos el alma y la mente, entrar en la paz del silencio, ese silencio que te permite escucharte, estar contigo con tu yo interno, cuando se tiene cierto grado de soledad interior puedes encontrar tu razón de ser, llegas a sentir tu verdadera esencia, logras identificarte con aquello que verdaderamente amas, aquello que por sobre todas las cosas te hace feliz, te llena y te satisface.

Deberíamos comenzar por amarnos a nosotros mismos, seria el primer paso a sanar nuestra alma, perdonarnos por nuestros errores, fracasos y omisiones, perdonar a todos aquellos que queriendo o no entraron en nuestra vida dejando rencores, rabias o dolor.

Pulir nuestros hábitos, en cuanto a pensamientos, seria otra paso a sanar ya que en ocasiones algunos malos hábitos, nos conducen involuntariamente a una interpretación deformada de la realidad y nos pasan cosas como, exagerar la importancia de un problema, de nuestros defectos o bien minimizamos la importancia de nuestras aptitudes o nos sentimos víctimas indefensas, en lugar de aceptar nuestra parte de responsabilidad en los hechos y no hacemos alguna cosa para mejorar la situación o escogemos un único detalle negativo de una situación determinada y centramos allí toda nuestra atención, de manera que la perspectiva general se oscurece.

Entonces sanarnos y amarnos, creo que esta seria la dirección, y es aquí donde interviene el poder de nuestro pensamiento, esta herramienta tan maravillosa, pensamientos positivos, de calidad, de prosperidad, de salud, de felicidad, de todo aquello que deseamos pero que tristemente no creemos merecer y esta es una de las causas de la frustración de mucha gente. No se aceptan como son y entonces fingen lo que no son y viven en la mentira, entrando en una dinámica que sólo puede llevar al fracaso.

Pon a funcionar el poder de tu mente, enfrenta tus temores, traza tu meta y mantente fiel a ella, encuentra soluciones para los obstáculos!!